El Centre d’Art sa Quartera d’Inca acoge desde este pasado sábado 1 de abril la exposición ‘Joan Lacomba: un tast guaitant per la finestra del temps, 1934-2022’. La muestra es una retrospectiva del artista multidisciplinario que combina las obras más destacadas de su carrera con una parte de su producción artística que inicialmente él mismo descartó. La exposición, que se podrá visitar hasta el 1 de julio, fue ideada inicialmente por Lacomba, que quería mostrar aquellas obras que no fueron elegidas o expuestas por alguna razón, y así ofrecer una visión aún más amplia de su recorrido artístico. Después de su muerte en 2022, Aïda Lacomba y Pere Lacomba, con la ayuda de la compañera de vida del artista, Joana Gomila, iniciaron un proceso de investigación para articular la exposición que él definió y ejecutarla.
La muestra incluye obra pictórica, dibujos rápidos, collage, cartelería y dos esculturas, y tiene como objetivo construir un proyecto como el que habría querido el artista, con obras primerizas de los años 60, de contenido más paisajístico, obras nunca expuestas que marcaron un antes y un después para su trayectoria y obras más contemporáneas que ayudan a comprender la versatilidad creativa de Lacomba.
Joan Lacomba nació en Son Espanyolet en 1934, estudió Bellas Artes en Barcelona y pronto se convirtió en un artista multidisciplinario, trabajando en dibujo, pintura, escultura, grabado, instalaciones, performance, teatro o escenografía. El artista se mantuvo activo hasta el final de sus días y la última exposición que inauguró fue meses antes de su muerte, en mayo de 2022, y ya estaba trabajando en ‘Un tast guaitant per la finestra del temps’. La exposición es un homenaje a una figura clave de las artes plásticas de las Islas Baleares y su producción pictórica incluye desde obras iniciales centradas en paisajes urbanos, retratos o bodegones minimalistas, hasta su etapa más consolidada y madura donde destacan las series ‘Ritmes’, ‘Reviscolaments’, ‘Sex’, ‘Terra i dona’, ‘Serres i serralades’ o ‘Bestiari’.
A lo largo de su carrera recibió varios reconocimientos, como el premio Ramon Llull del Govern de les Illes Balears, el premio Emili Darder de l’Obra Cultural Balear, el premio de la II Gala de les Arts Escèniques del Consell de Mallorca y el premio Fra Miquel Gual de l’Obra Cultural Balear. La elección de la ciudad de Inca como espacio para la muestra no es casual, ya que, aunque era natural de Palma, Lacomba dedicó gran parte de su vida a Inca, donde trabajó como profesor de secundaria, combinando así dos de sus pasiones, la docencia y el arte.
